Acordamos que el Museo Minero no acogiera actos políticos pero Zapata (PP) vuelve a faltar a su palabra
El alcalde y candidato del PSOE de La Unión explica que el Portavoz Popular exige el Museo Minero como escenario electoral pese al pacto de Junta de Portavoces.
El alcalde y candidato del PSOE a la Alcaldía de La Unión, Pedro López Milán, ha denunciado que el portavoz municipal del PP, Joaquín Gabriel Zapata, ha vuelto a incumplir su palabra y ha solicitado al Ayuntamiento la Sala de Usos Múltiples del Museo Minero como espacio electoral para un acto político el próximo 6 de mayo.
López Milán ha explicado que en la Junta de Portavoces del pasado 20 de marzo, los tres representantes municipales, entre los que se encuentra Zapata, acordaban que dicho espacio quedara fuera del conjunto de espacios municipales destinados para la celebración de actos políticos ante las próximas Elecciones Municipales del 28 de mayo.
Pese al acuerdo inicial, un mes después, el portavoz popular ha solicitado al Ayuntamiento el uso de dicho espacio por lo que entendemos que “no respeta ni al edificio, ni a los donantes de todo el patrimonio minero, ni a los profesionales de la museografía y solo le interesa la foto, el aprovechamiento y uso partidista de las instituciones para su propia campaña electoral dentro de la sede del Museo, orgullo y emblema de todos los unionenses”.
El candidato socialista además ha recordado que el uso del edificio es exclusivamente cultural y turístico, por lo que parecía lógico convenir entre todas las fuerzas políticas salvaguardar de cualquier acto de índole política este museo que habla de la memoria y del pasado de la minería, testigo de la historia colectiva más reciente de todos los vecinos y vecinas de La Unión. López Milán ha señalado que el Ayuntamiento ha ofrecido escenarios alternativos a todos los partidos para que puedan celebrar sus actos políticos, como el Antiguo Mercado Público, el Salón del Actos de La Casa del Piñón o el Centro Cultural Asensio Sáez, por lo que “no entendemos ese cambio de timón, esa falta de respeto y falta de lealtad institucional que no hacen sino teñir de colores políticos un edificio emblemático para todos los unionenses, que siempre debería permanecer ajeno a cualquier uso electoralista”.